No se nada de arquitectura, mucho menos de interiores
Introducción a la recaudación de fondos
Lo que me gusta de la arquitectura es que no es sólo sobre edificios o espacios que cuestan millones, se puede construir “algo” con estética y una atmósfera sofisticada o elegante por menos. Pero ese menos precisamente tiene mucho valor.
Por mencionar un ejemplo, un “coffee shop” o “coffee house” francés puede ser pensado y construido para disponer personas cerca del área de atención, junto a otros espacios a las afueras del local. Al “aire libre” las cosas son más emocionantes. Además las mesas dispuestas en el exterior pueden ser justificadas por distancias.
Lucirse es una forma de obtener gloria
La distancia para dar felicidad a los interesados de un servicio tiene un rol muy importante, mientras más se tenga que recorrer para brindar una atención, implica una buena excusa para subir el costo por servicio.
“Terrasse”
Más genial aún, esto se puede reproducir en otros conceptos de negocios. Por ejemplo, algunos bares, creados para concentrar personas en sus costados, alrededor. Lo mismo parece suceder con los que utilizan bastante bien el vidrio, o los niveles de pisos, entre otras cosas.
“The Moron Neuron”
Es muy probable que estos lugares de ocio pasen siempre super llenos. Porque permite a las personas que están en un piso superior ser contempladas por quienes se encuentran en los niveles inferiores y a las que están dentro dejarse ver por quienes se encuentran esperando por entrar. En la fila, es probable que de manera inconsciente, las personas van a querer imitar ese comportamiento que ven a lo lejos, probablemente en una persona que admiran, desean emular o quién sabe diantres.
Como humanos poco entrenados necesitamos satisfacer ese tipo de ilusiones a toda costa, se puede resumir en esa eterna ansiedad por lucir el estatus social, lo que nos proyecta como buenos genes y probablemente nos permita ganar retoñitos.
Vivir responsablemente no tiene por qué ser un rompecabezas
Lo que me gusta de tomar paseos por un supermercado con grandes publicidades abogando por un estilo “Green Life“, es que las personas caminan, tocan, huelen y vuelan la imaginación con todos esos productos que permiten proyectar todo lo estable y saludable que un individuo se puede ver en la caja cuando le están empacando los productos. Es probable que también no se tiene la consciencia para descifrar que de hecho se está pagando demasiado dinero por una simple confusión con el yo.
Recaudación de fondos, lobby que reconoce al otro YO
Como las técnicas anteriores tienen algo de sentido en nuestro comportamiento. Me parece oportuno contar una historia simple pero salvaje y romántica, que puede interesar a las organizaciones sin fines de lucro, es probable que muchas organizaciones “desconocen” esto y por eso no la han adaptado como una posible estrategia, más efectiva por cierto.
Causas que apelan a nuestro comportamiento
Es muy bonito ver “sitios Web” que tienen un formulario electrónico para captar donaciones en línea, que procesan las transacciones con tarjeta de crédito y listo, todo muy intuitivo y fácil.
Pero falta un condimento semi-secreto, este es, un enganche con las emociones de las personas para brindarles algo más de lo que esperaban, este precisamente sería el discurso cursi.
Esto es enganche emocional en esteroides – “Oooh Koko is cute”
Muro de reconocimiento
Imaginen esto, si en el proceso de realizar la donación, tan sólo se le pregunta a la persona si desea ser pintada como cooperante en un muro especial que agradece y reconoce a los y las donantes.
“The Tea Party Show”
Es muy probable que el YO si estaba deseando a toda costa desde un principio que reconozcan públicamente su presencia. Esto es, sólo una técnica que apela a ese deseo primitivo por lucirnos, que en este caso puede ser traducido en una interesante campaña para recaudar fondos para darle forma y esperanza a ese mundo mejor.
Boca en boca, mente en mente
Hay técnicas para la recaudación de fondos, que son super emocionantes, excitantes y además mueven las aguas para todos lados: “Guerrilla Marketing” y “Street Art“.
Y las típicas habilidades del Kung Fú:
- Me gustas: Desafíos, concursos o juegos participativos en redes sociales.
- El pseudo-spam que casi todo el mundo omite de manera automática, ese mediante listas de correo, boletines electrónicos o newsletters informativos. Esto sucede cuando la suscripción al boletín no permite seleccionar, por ejemplo, temas de interés, género, ubicación, entre otra información útil para segmentar la audiencia o público meta.
- Las molestas llamadas por teléfono para entrevistar personas con aburridas preguntas, que escarban información privada y sensible.