Tengo que advertir acerca de una posible mala comprensión, de que el socialismo es totalitario por su naturaleza. Esto afecta a los países supuestamente socialistas gobernados por socialdemócratas, que está claro que algunos no son dictaduras totalitarias. Claro que tener un bondadoso superávit ayuda, tanto como el buen reparto de los beneficios del petróleo o energía nuclear, entre otras ventajas que siempre vale el esfuerzo escarbar y mencionar. Se vuelve de suma importancia investigar los sistemas de salud y de educación, sean estos mixtos o no, junto a otros conceptos que afectan al libre mercado, como lo son: salarios mínimos, permisos, regulaciones, aguinaldos o bonos, garantías, pensiones, seguros, protecciones, incentivos…